María Lucía Franco, subdirectora de Educación y Participación del Minambiente. |
Durante dos
días, mujeres indígenas, campesinas y afrocolombianas de diferentes regiones
del país compartieron sus experiencias y conocimientos en torno a la
conservación ambiental de sus territorios, y reflexionaron acerca del papel que
juega su género en la protección de la biodiversidad mediante el desarrollo
ambiental y sostenible de sus comunidades.
A superar las brechas de género
María Lucía Franco, subdirectora de Educación y Participación del
Minambiente expresó: “Buscamos empoderar
y visibilizar el rol de las mujeres como cuidadoras de la naturaleza, superando
las brechas de género que existen en los sistemas patriarcales y promoviendo
mecanismos de participación incidente en el aprovechamiento, uso y conservación
de los recursos naturales”.
A través de
talleres que incluyeron bailes, dibujos, representaciones y mucha imaginación,
estas lideresas identificaron similitudes en los roles que han desempeñado en
sus territorios para proteger los ecosistemas que históricamente han alimentado
y curado a sus pueblos, y que hoy se ven amenazados por diferentes factores,
poniendo en riesgo su cultura y la permanencia de estas comunidades en el
territorio.
Después de una actividad en la que dibujaron su silueta en papel y ubicaron en él el fuego, el éter, el gua y el viento, para identificar lo que son sus raíces, fortalezas, pasiones y saberes, las asistentes al encuentro confirmaron que tienen en común su amor y dedicación por la conservación de la biodiversidad, además de la motivación y el empeño por capacitarse para fortalecerse y seguir tejiendo redes.
Los saberes están en sus manos
“Identificamos
que los saberes de las mujeres en la naturaleza son el cuidado de las plantas,
la siembra de las semillas, la siembra de los árboles nativos y el cuidado de
nuestras especies medicinales, como también la transmisión de los conocimientos
de los saberes ancestrales”, manifestó Lorena Matabonchoy, de la organización
comunitaria Asoyarcocha, en el corregimiento El Encanto (Pasto).
Al
reflexionar sobre la esencia de la mujer, se concluyó que son luchadoras,
trabajadoras, dadoras de vida, protectoras, armonizadoras, escuela de formación
y conservadoras de la cultura y la tierra; piensan en el bienestar de quienes
las rodean, incluyendo el de la Madre Tierra y sus soluciones, no solo tienen
en cuenta el ahora, sino también el futuro.
Espacios que sí las reconocen
Otra de las conclusiones del encuentro es que los retos por los que atraviesan estas lideresas no son pequeños. Deben enfrentar la falta de conciencia y empatía hacia la mujer por parte de sus propias comunidades, además del individualismo y la indiferencia de muchos. Por eso, estos espacios de reconocimiento resultan fundamentales a la hora de animar a las mujeres a que sigan adelante con lo que han venido haciendo en pro de sus territorios, su gente y el ambiente.
Fuente: Mabel Rocio Castillo Pineda
Prensa - Redes: @MabelPrensa
Ajuste de contenido y
diagramación: bersoahoy.co
No hay comentarios.:
Publicar un comentario