El presidente de la Conferencia Episcopal colombiana, monseñor Luís José Rueda Aparicio le hizo un llamado cordial hoy a los violentos, para que depongan las armas y las cambien por herramientas que propicien la concordia, la hermandad y el desarrollo social.
El prelado de la iglesia retomando pasajes bíblicos, expresó que a esos violentos que le quitan la vida a policías, militares, dirigentes cívicos y otros indefensos, llevados por el odio, la venganza y la ambición del poder de las drogas, de nada les sirve atesorar bienes y dineros, si al morir pierden uno de los dones más preciados del ser humano como es la dignidad del alma.
Monseñor Rueda Aparicio hizo estas y otras consideraciones sociales en la acostumbrada homilía dominical de la catedral primada de Bogotá.
El orientador espiritual lamentó cómo por la ambición de poder y dinero fácil, se atropellan los derechos de los demás y se pone en riesgo la estabilidad institucional del país con futuros graves resultados para todos, entre ellos los actores armados, y pidió que se busquen salidas pacíficas, porque por la vía de las armas no se hallarán sino lamentos y desventuras que recaerán a todos. (Redacción bersoahoy)
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